Uno de los momentos más cruciales para todo padre es el día que escogen el nombre del bebé que están esperando.
Muchos padres conocen, incluso años antes de la concepción del niño, el nombre que desean ponerle al bebé. Otros, por el contrario están completamente desorientados y desconocen el nombre que desean darle a los niños.
Muchos padres restan importancia al significado de los nombres en los niños. Es, para ellos, simplemente la asignación de un nombre. Otros, son conscientes de que el nombre no solo acompañará al niño desde el momento del nacimiento hasta el día de su muerte sino que, además, el nombre puede ejercer una influencia importante sobre cada niño ya que expresan las características y poderes del nombre sobre él mismo. Así, el nombre que se escoja incidirá en el tipo de personalidad que el niño forje a lo largo de su vida.
¿Cómo elegir un nombre?
Muchos padres escogen un nombre por la fonética, es decir eligen un nombre que concuerde o no resulte chocante con el apellido del niño. Otros padres escogen un nombre que tenga un bonito diminutivo.
Algunos prefieren un nombre extenso, otros uno corto. A veces los padres eligen un nombre que no tenga otros significados en otros países o regiones.
En síntesis existen tantas formas de elección de los nombres como padres sobre el planeta.
La creencia del primer y del segundo nombre en los niños
Existen determinadas creencias que afirman que el primer nombre del niño (por el nombre que generalmente se le conocerá) es aquel que representa su yo interno, es decir, su personalidad.
Por otra parte, muchos padres escogen un segundo nombre para su hijos. Este segundo nombre, a menudo, es el nombre de algún antepasado al que quieren recordar llamando al nuevo niño con dicho nombre (aunque ciertamente nunca lo use). Este segundo nombre, y siguiendo esta creencia, representa al grupo familiar al que va a pertenecer el niño. También tiene una interpretación social. Es decir que el niño será conocido por su primer o segundo nombre y esto determinará el tipo de personalidad que éste adquiera en su vida.
Para finalizar, esta creencia sostiene que “es mejor llamar al niño por su primer nombre para que así él pueda desplegar toda su personalidad y no sólo la de su grupo familiar”.
Ausencia de segundo nombre
Muchos padres asignan un único nombre a sus hijos. Esto, mayormente está relacionado con una cuestión cultural y dependerá de las costumbres y raíces de cada familia así como también de su procedencia.
El significado de los nombres
Cada nombre tiene un significado. Este deriva, en la mayoría de los casos de costumbres, creencias y poderes que se le atribuían a los nombres en las civilizaciones antiguas. Con los años, algunos de estos significados se han perdido. Otros continúan hasta nuestros tiempos.
Sugerencias
Ya sea que nos basemos en una interpretación de los nombres por una creencia religiosa, tradición, idioma o cultura, lo cierto es que, la llegada de un nuevo bebé es un acontecimiento importante que marcará la vida de toda la familia. Planear el nombre de un niño/a es tan importante como el resto de los aspectos a tener en cuenta.
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