4 cualidades que el profesor particular de tu hijo debe tener

Las razones por las que contratar un profesor particular son variadas. Los padres podemos cerciorarnos de una bajada de rendimiento de nuestros hijos y darnos cuenta de que están perdiendo motivación o de que una asignatura en particular se les ha atragantando.

Las clases particulares son una buena solución para todos estos problemas. Sin embargo, es importante escoger bien el profesor particular para nuestro hijo; pues de él dependerá, en parte, su éxito académico.

Además de enseñar, es importante que exista química entre ambos y que nuestro hijo no vea las clases como una carga, sino como un apoyo que mejorará su rendimiento escolar.

En las siguientes líneas podremos encontrar qué claves han de tenerse en cuenta a la hora de escoger al profesor particular más adecuado.

Especialización

Debemos asegurarnos de que el profesor particular cuenta con los conocimientos necesarios para impartir clase de una materia determinada. Es un punto que debería darse por sentado, pero cerciorarse de ello es importante para que realmente el profesor particular pueda ayudar de la manera más propicia a nuestros hijos y a nuestras hijas.

Los niveles de especialización también cambian dependiendo del curso en el que se encuentre nuestro hijo, pero deben contar con el mínimo para poder solventar cualquier dificultad que pueda surgir.

Pedagogía 

Ser especializado en la materia es indispensable para ser el profesor particular apropiado. Sin embargo, es igual de importante saber cómo impartir esos conocimientos. La capacidad de adaptación es básica y el profesor debe ser capaz de constatar las necesidades de cada alumno para saber tratar con él.

Es importante que un profesor particular conozca diferentes metodologías de enseñanza que se adapten a cada alumno. Las personalidades de los niños son muy diferentes entre sí:  hay quien tiene mayor confianza en sí mismo y requiere ejercicios más complicados de perfeccionamiento. O hay quien se distrae más fácilmente, por lo que necesita ejercicios dinámicos que le hagan mantener la concentración de manera continuada.

Tampoco hay que dejar de lado la edad del alumno. Un profesor particular de primaria es diferente a uno de la ESO o de Bachillerato. Las capacidades cognitivas o el nivel de maduración son completamente diferentes dependiendo de la edad, por lo que cada alumno requerirá y demandará determinadas necesidades que el tutor debe tener en cuenta.

En conclusión, en la escuela los niños reciben una educación homogénea, la misma que todos sus compañeros, y el profesor particular idóneo debe ofrecer a los alumnos una educación adaptada a cada uno de ellos. Para un profesor de aula es difícil ofrecer altos niveles de atención individual, pues no puede centrarse en solo un alumno y sí en el global de la clase. El profesor particular, en cambio, debe atender a cada alumno de manera especializada.

Conexión con el alumno 

El alumno necesita sentir que confía en el profesor particular. Lo normal es que vea la figura del profesor en la escuela de manera más autoritaria, sin generar demasiados lazos estrechos con él. Sin embargo, el profesor particular adecuado debe trabajar una relación de confianza con el alumno. Sin perder tampoco las nociones mínimas autoritarias para que el alumno siga manteniendo la atención en las clases. Es bueno que el alumno lo vea como un “amigo” que le ayuda en su desarrollo académico.

El tutor particular debe tener nociones sociales que generen confianza y acercamiento en el alumno. En las escuelas están 6-7 horas escuchando a profesores con los que suelen tener relaciones más frías y en las clases particulares suelen buscar un oasis donde ver al profesor particular como un “amigo” que le enseña y apoya.

Para ello, está claro que el profesor particular debe contar con nociones sociales, que sepa adaptarse a las diferentes personalidades que se va a ir encontrando y poder encajar con cualquiera de ellos. Debe contar ser adaptable, espontáneo y extrovertido en cierta medida.

Flexibilidad

El profesor particular apropiado debe ser capaz de dar clases tanto presenciales como telemáticas. Empresas como GoStudent son pioneras en ofrecer clases particulares a través del ordenador, y un profesor particular online debe ser capaz de adaptarse a ellas. Puede parecer que, para los niños, mantener la concentración y la atención a través de una pantalla no es fácil. Aunque estén habituados a las pantallas, las suelen utilizar para tiempo de ocio y no tanto para aprender. No obstante, un tutor adecuado, como los de GoStudent, sabe cómo conseguir que se concentren y cómo sacar su máximo rendimiento.

En definitiva, el profesor particular apropiado debe ser flexible, adaptable a cada alumno, saber generar confianza y contar con la especialización necesaria para dar clases de diferentes materias. Como consejo final, es bueno poder concertar una entrevista con el profesor particular o constatar estas nociones en una primera clase gratuita. ¡Es una forma de conocer quién será el encargado de mejorar el rendimiento académico de nuestros pequeños!