En el proceso enseñanza-aprendizaje intervienen distintos factores y variables y precisamente cuando se trata de niños son aún más los elementos que hay que analizar, ya que el rendimiento de cada alumno tiene una personalidad distinta, de ahí la importancia de la psicología educativa en la mejora de las habilidades cognitivas del estudiante.
Por eso, un psicólogo se convierte en un excelente apoyo para el pequeño, ya que estos profesionales conocen las técnicas para controlar diversas situaciones que a los padres les puede resultar más compleja.
Los psicólogos identifican y contribuyen a solucionar los problemas educativos en el estudiante
El comportamiento de los individuos en relación con el entorno educativo es bastante diverso, por eso los padres muchas veces tienen que acudir a solicitar los servicios de un psicólogo en madrid para entender algunas conductas en sus hijos que retrasan su crecimiento y desarrollo en el ámbito escolar, por lo cual este profesional garantiza una extraordinaria ayuda para comprender de mejor manera este proceso de enseñanza en los niños.
El razonamiento lógico en el pequeño es muy abstracto, ya que según algunos psicólogos educativos los niños maduran a través de cuatro etapas de capacidad cognoscitiva, lo cual en la mayoría de los casos es una teoría desconocida para los padres.
Y son precisamente estos especialistas los conocedores de las prácticas y técnicas para desarrollar una inteligencia espontánea en el menor que le permitirá obtener un mayor rendimiento escolar.
Importancia del acompañamiento de un psicólogo en las primeras etapas de aprendizaje de los niños
La psicología educativa tiene un papel fundamental en la mejora del comportamiento de los niños ante el escenario escolar, y es que si hay estudiantes que se adaptan con facilidad a los ambientes educativos, también existen alumnos que desarrollan conductas inadecuadas en este sentido, y esto requiere de orientación profesional.
De esta manera, un especialista en psicología analiza los comportamientos de cada alumno para conocer sus debilidades y mejorarlas, así como descubrir sus fortalezas y ayudarlo a potenciarlas. Asimismo, este profesional diagnóstica las discapacidades funcionales, sociales y psíquicas para guiar al estudiante por el camino correcto.
Asimismo, el psicólogo se convierte en un excelente mediador entre los padres, el profesor y el alumno para resolver cualquier problemática que se esté presentando en el área educativa y facilitará que cada individuo asuma su rol desde el perfil que le corresponde.
¿Cuáles problemas escolares puede solucionar un psicólogo infantil?
Sin duda, son múltiples los problemas que puede ayudar a solventar un psicólogo infantil, ya que el niño en la edad escolar experimenta muchos cambios en el ámbito de la conducta y está expuesto a distintos escenarios sociales que pueden intervenir en su comportamiento de manera positiva o negativa.
En el caso del panorama educativo, estos especialistas en el análisis de la conducta y los procesos mentales pueden explicar de forma bastante clara un comportamiento que esté experimentando el menor.
Por ejemplo, algunos niños desarrollan fobia escolar, lo cual no es más que la negación permanente para asistir al colegio y esto puede haberse generado por una situación determinada que haya vivido el pequeño dentro de la institución educativa.
De la misma forma, el acoso escolar o bullying, como normalmente se le conoce, en la actualidad es uno de los principales temas que motivan a los padres a buscar ayuda psicológica, ya que esta situación puede generar daños graves en la conducta de los niños e incluso interferir en el rendimiento de estos en sus actividades académicas.
¿Cómo actúan los psicólogos infantiles?
Por lo general, el profesional realiza una valoración del niño, los padres y el entorno escolar para diagnosticar los principales problemas que están interviniendo en el comportamiento del estudiante y así desarrollar las terapias adecuadas para una mejora en la conducta del infante.
Posteriormente el psicólogo establece el tratamiento para educar al niño en la afronta de los problemas. Es decir, se sirve de algunas herramientas técnicas que le permitirán al pequeño desarrollar fortalezas emocionales para mejorar su comportamiento y en consecuencia asumir de mejor manera el proceso de enseñanza.
En otro tipo de casos como abusos infantiles y situaciones de custodia, el psicólogo infantil recomendará las alternativas que más favorezcan al menor y le permitan asumir de manera más racional estas situaciones.
Además, también le permitirá que desarrolle sus propias habilidades y herramientas psicológicas para que las condiciones que le haya tocado vivir no influyan de manera directa en su rendimiento académico.
En definitiva, un psicólogo puede ser un excelente acompañante durante el proceso de enseñanza, indistintamente de que el niño tenga problemas graves de conducta o no, ya que este profesional conoce muy bien cada etapa que desarrolla el pequeño en edad escolar, permitiendo que los padres, los profesores e incluso el mismo alumno comprenda su propio comportamiento conductual.