Muchos no saben cómo enseñar a los niños algo que suena muy complicado, pero en realidad resulta muy fácil de aprender, como la tabla periódica. Con un poco de astucia y creatividad, se pueden lograr resultados positivos en muy poco tiempo e incluso entretenerlos en cualquier momento. Las fábulas también son otra forma de aprendizaje, los niños ponen a volar su imaginación y aprenden nuevas cosas sanamente.
Pasos sencillos para que un niño memorice la tabla periódica
Es muy importante para todos los niños conocer tabla periódica, y aunque muchas veces suele parecer difícil de recordar los 118 elementos que la conforman, debido a que cada uno tiene su propio símbolo y número atómico, la niñez es la etapa perfecta para que ellos puedan memorizarla diariamente. Con un poco de práctica, frases, ilustraciones, dibujos, reglas mnemotécnicas e incluso juegos de mesa, ayudarán a que el aprendizaje sea más fácil mientras se divierten.
Memorizar los elementos
La base principal es que se conozca cada nombre de los elementos, números atómicos, símbolos e incluso las masas atómicas. Para cada elemento, todos estos factores se registran en un recuadro el cual tiene su propio nombre escrito en letra pequeña bajo el símbolo. Por ejemplo: la palabra Magnesio se refiere al nombre de un elemento. El símbolo de un elemento consiste en una o dos letras, las más grandes están en la caja. Así, Mg representa el símbolo del Magnesio.
El número atómico se coloca encima del símbolo, indica la cantidad de protones del elemento. La tabla periódica está organizada de acuerdo con este número, la del Magnesio es de 12.
La masa atómica o peso atómico da una idea del tamaño promedio de un átomo. El número correspondiente se encuentra bajo el símbolo, por ejemplo, el del Magnesio es 24.312.
Para memorizar algunos de estos elementos diariamente, es recomendable iniciar con los primeros 10 de la tabla, una vez memorizados se añaden 10 más y así sucesivamente, revisando con regularidad las estudiadas anteriormente.
Imprimir la tabla periódica
Una tabla impresa para colorear se podrá llevar a donde sea. Se recomienda imprimir más de una copia y hacer que los niños la coloreen constantemente mientras memorizan cada símbolo y número de los elementos. También se puede utilizar una copia digital en la tablet o teléfono inteligente, para que jueguen mientras están en casa.
Dividir la tabla en secciones pequeñas:
Se puede proceder por fila, columna, número atómico o simplemente pasando de lo más simple a lo más complicado. Buscando combinaciones para dividir la tabla en varias partes que se recuerden fácilmente.
También proceder por grupos: gases nobles, halógenos, cuerpos alcalinos o metales de transición. Los grupos están dispuestos verticalmente en columnas numeradas del 1 al 14.
Las áreas coloreadas de la tabla se denominan bloques, ayudarán a recordar la ubicación de cada elemento en la tabla. Por ejemplo, el Bloque D, en el centro de la mesa, reúne los grupos 3 a 12. Las líneas de la tabla corresponden a los período, van del 1 al 7.
Es fácil que los niños realicen esto durante sus descansos o el recreo. En lugar de estudiar durante largas horas, pueden hacerlo cada vez que tengan tiempo. Ya sea en un viaje en autobús, el almuerzo o cuando usan Internet.
El mundo de las fábulas para niños
Las fábulas de La Fontaine y los cuentos de Grimm han conmovido a generaciones de niños. Detrás de ellas hay una lección de vida donde la risa y la melodía de las palabras invitan a la reflexión. Desde » La cigarra y la hormiga «, una conocida fábula de La Fontaine, hasta las fábulas inéditas de Whisperies como » El zorro y la yema «, son los animales y la naturaleza los protagonistas.
Las fabulas cuentan una historia corta y divertida que pretende enseñar al lector algo mientras lo entretiene. Los personajes son típicos, a veces encarnados por animales. Consta a menudo de dos partes, pero muy desiguales: «el cuerpo es la fábula, el alma la moral», escribe La Fontaine. La narración pictórica permite, por tanto, captar una regla moral abstracta.
Los temas principales
- Los animales: Los actores principales de las fábulas son animales que hablan y cobran vida ante los ojos del lector. Todos están presentes; animales salvajes y domésticos, animales grandes, pequeños y feroces.
- La gente: pinta tanto a los grandes como a los pequeños, desde ricos y reyes hasta madereros, pastores y campesinos pobres pueblan las fábulas. La muerte y el leñador es una excelente descripción de la vida campesina del siglo XVIII.
- La muerte: es un tema importante y bastante recurrente en las fábulas. Generalmente se presenta como inevitable, la condición misma de la naturaleza.
- El hombre: Aunque los animales juegan un papel muy importante, la observación concierne al hombre, su vanidad, su codicia, su hipocresía. Las leyes que rigen a los hombres son denunciadas por La Fontaine, quien lamenta que los poderosos, los ricos, sean siempre los más fuertes.
El marco espacio-temporal
Al igual que los cuentos, las fábulas se sitúan generalmente en un período de tiempo vago y en lugares indefinidos (la ciudad, los campos). Sin embargo, hay algunos detalles de la vida del siglo XVIII en él: una alusión al rey, a los cortesanos y a la Iglesia.