La educación alternativa se ha venido implementando desde hace ya varios años y, ante las limitaciones y la desmotivación que se está viendo en los niños de hoy en día que frecuentan el sistema convencional, ha ido aumentando su popularidad al momento de decidir el sistema educativo que los padres quieren para sus hijos. Bajo una filosofía de estimular la creatividad y la autonomía, en la actualidad se pueden encontrar muchos recursos y juguetes que se basan en estos sistemas.
¿En qué consiste la educación alternativa para niños?
Se entiende por educación alternativa para niños a las metodologías que se contraponen a la rigidez que el sistema convencional impone en la enseñanza de los contenidos. Entre las metodologías más conocidas se encuentran el sistema educativo Montessori, el método Waldorf, el método Kumon, entre otros, que tienen en común potenciar la autonomía y la creatividad de los alumnos de una forma lúdica y participativa, utilizando herramientas como los juguetes Montessori que le permite a los pequeños, la libertad de aprender a su propio ritmo y de forma progresiva, al realizar las tareas cuando están jugando.
La principal característica de los métodos alternativos es que la enseñanza se hace desde una aproximación cercana al niño, lo que facilita despertar en los pequeños el interés por aprender nuevas cosas. Además, es un proceso paulatino en el que, mediante la dirección de los maestros, se les da a los niños las herramientas que necesitan para fomentar un aprendizaje autodidacta. De esta manera se estimula la autonomía y la independencia en el proceso de formación.
El objetivo de estos modelos de pedagogía es incentivar un aprendizaje significativo y consciente en cada uno de los pequeños. Aunque cada método de enseñanza usa una estrategia distinta, el objetivo está dirigido a estimular las habilidades de los pequeños desde una perspectiva creativa, colaborativa e independiente, donde aprender no significa memorizar sino encontrar la respuesta, motivados por la curiosidad de saber cómo se hacen las cosas.
Una modalidad que pone la atención en la estimulación de las habilidades de los niños
El método Montessori es uno de los sistemas educativos más populares que plantea una propuesta de aprendizaje alternativo. Bajo esta modalidad, el aprendizaje de los niños se estimula a través de juegos que potencian la autonomía y la creatividad para resolver las actividades planteadas. Uno de los pilares de este método se centra en respetar el tiempo de cada pequeño, donde no sentirán la presión de tener que aprender todo en un día, sino que podrán ir desarrollando sus habilidades a su propio ritmo.
Es una metodología que centra la educación en los niños, colocándolos como los protagonistas tanto en el aula como en la casa, con la finalidad de estimular en ellos el pensamiento propio y la adquisición de una independencia física y psicológica desde temprana edad. En estos casos los adultos cumplen la función de ser orientadores en el proceso de formación, ya que el niño tendrá siempre la libertad de escoger lo que quiera aprender y cuándo quiera, pues es el mejor momento para explotar al máximo la curiosidad innata que tienen por conocer las cosas.
El método Waldorf es otro de los métodos de educación alternativa más conocidos, este sistema educativo tiene muchas similitudes al método Montessori. Ambos promueven el respeto a los tiempos de formación de cada niño, así como la estimulación de la creatividad y la autonomía para aprender por sí solos. El método Waldorf se caracteriza por estimular un proceso de formación libre y cooperativo, donde lo importante no es la nota, sino aprender cosas nuevas de una forma divertida y estimulante.
Dentro del programa de formación que se imparten en los colegios que utilizan este sistema, se incluyen asignaturas artísticas en las que los niños pueden expresarse libremente a través de la música, la danza o la pintura, permitiendo que tengan un desarrollo completo que se apoya en los trabajos manuales. La idea principal es formar niños autónomos con la capacidad de establecer sus propias normas, porque la disciplina y la proactividad son fundamentales en estos sistemas.
Juguetes que ayudan a estimular la creatividad y la autonomía
La educación de los pequeños es un proceso complejo que debe realizarse tanto en los colegios como en la casa, por lo que es fundamental que los padres también incorporen herramientas que les permitan tener nuevas experiencias divertidas y educativas en el hogar. Los juguetes diseñados bajo el concepto de la metodología Montessori son un excelente complemento para las horas de juego en el hogar, donde el pequeño tendrá la oportunidad de divertirse al mismo tiempo que descubre y aprende la manera de utilizar cada uno de los que disponga.
Los juguetes Montessori están diseñados para potenciar el aprendizaje de los pequeños, lo que los hace diferentes a los juguetes de moda que buscan solo generar entretenimiento. Una de las principales cualidades al optar por este tipo de juguetes es que vienen clasificados por edades, con la finalidad de que la experiencia lúdica sea adecuada a la etapa del desarrollo en el que se encuentre el pequeño, logrando con esto el desarrollo de las distintas habilidades motoras, creativas, emocionales, sociales, entre otras.
Un aprendizaje efectivo es posible solo cuando los niños se encuentran en un espacio estimulante. En casa puedes acondicionar una zona de juego donde tu hijo pueda explorar con tranquilidad todo lo que tiene a su alrededor. Los juguetes Montessori están hechos para que sean utilizados de una manera, pero no traen un libro de indicaciones, lo que permite que sea el niño quien explore, estimule su creatividad y aprenda a divertirse mientras está desarrollando otras habilidades.
Educar a nuestros hijos con las metodologías alternativas es una forma de darles la oportunidad de que disfruten al aprender y se olviden de la desmotivación de memorizar textos para pasar un examen. Desde que comienza su proceso formativo es importante enseñarles a ser independientes, a resolver los problemas que se le presenten, a ser creativos y a expresarse con libertad. Todo esto y más, es lo que los sistemas alternativos como el método Montessori o el método Waldorf buscan incentivar en la formación de los pequeños.