Un tema muy delicado es el que tiene que ver con la custodia compartida de los hijos cuando se concreta un proceso de divorcio o una separación. En este caso, lo más recomendable es buscar la asesoría inmediata de un abogado de familia, que sea experimentado, y que privilegie el derecho que tienen los menores de 18 años a una vida sin complicaciones, con acceso a lo fundamental, que es el amor y el cuidado de ambos padres.
Conseguir los servicios de profesionales del Derecho en esta área es posible a través de distintos portales en Internet, que tienen a disposición bufetes especializados para garantizar a la familia que los más pequeños puedan gozar de todos los derechos y los padres tengan igualdad de condiciones y oportunidades en relación a la protección de los hijos.
Mayor responsabilidad para los padres
Cuando un hombre y una mujer se convierten en padres asumen una inmensa responsabilidad y, por ende, deben tener muy claro que ante cualquier circunstancia de la vida, los hijos siempre estarán allí y deben ser objeto de su pleno amor y protección.
Al producirse un divorcio, si la pareja tiene hijos menores es oportuno resolver los aspectos esenciales de la custodia compartida, porque tanto el padre como la madre, a pesar de la separación y las diferencias, tendrán que acordar de qué manera cumplirán con las responsabilidades relacionadas con los hijos menores de edad.
Para ejercer la custodia legal en igualdad de condiciones, lo más aconsejable es recurrir a un profesional abogado de familia, por cuanto evaluará el caso y buscará la manera de garantizar la cobertura de los derechos fundamentales de los niños cuando se otorgue este régimen.
Es fundamental que los entes involucrados sean conscientes de que, ya de por sí, el divorcio es un proceso traumático, de manera que para alcanzar el acuerdo entre la pareja que decide separarse, se requiere la buena voluntad de cada uno, al priorizar lo que será el futuro inmediato de los hijos.
Acuerdo que beneficie a las partes
Mediante el convenio regulador que concierne a los procesos de divorcio o separación se podrá pedir la guarda compartida, según los aspectos previstos en el artículo 92 del Código Civil. Los criterios que deberán privar para lograr la custodia son los siguientes.
Interés superior de los menores
En los divorcios, el máximo privilegio lo tienen los niños, porque en ningún caso deberán quedar desprotegidos, razón por la cual todos los derechos deberán quedar cubiertos por las partes, a saber: alimentación, estudios, vestimenta y calzado, al igual que una vivienda digna y estable para la adecuada pernocta y su normal desarrollo.
Relación con los hijos
El juez del caso evaluará de manera detallada la relación que tiene cada uno de los progenitores con los pequeños, al igual que la capacidad que tengan para atenderlos, al dar cobertura a todas las obligaciones para con los menores.
Comportamiento entre padres
Pese a los desencuentros, la expareja deberá mantener un mínimo de cordialidad ante los pequeños. Hay que tener en cuenta que el juez podrá decidir sobre la solicitud de guarda de alguna de las partes, sostenido en el informe psicosocial preparado por profesionales de Trabajo Social y de la Psicología, para realizar el dictamen final.
Número del grupo familiar
Es otro factor esencial, porque aparte del amor y la posibilidad que tenga la expareja de cubrir las necesidades de los niños, también hay que tener en cuenta el factor económico, al depender del número de personas del grupo familiar.
Aspiraciones
Si el juez de la causa determina que los hijos tienen suficiente grado de madurez, podrá consultarles los deseos y tenerlos en cuenta a la hora de decidir los detalles de la custodia compartida, al evaluar al mismo tiempo, los respectivos informes psicosociales.
Excepciones
El juez no tendrá contemplaciones respecto a casos de violencia intrafamiliar que arriesguen la estabilidad de los hijos. Si existe alguna condena en estos casos, de inmediato, se rechazará la asignación de la guarda.