5 cuentos con moraleja para que los niños aprendan

cuentos con moraleja

En la vida diaria, los padres suelen buscar formas creativas de enseñar a los niños, de manera que siempre se encuentren aprendiendo cosas nuevas -sobre todo valores y cualidades positivas para la vida-, pero también, que no se aburran en el proceso. Los cuentos con moraleja o directamente las fábulas son un recurso ideal en ese sentido.

Las fábulas son elementos geniales para la educación de los niños, en primer lugar, porque fomentan la lectura, ya que casi siempre mantienen el mismo formato que a los niños les encanta, que es el de objetos o animales con características humanas; pero también, fomentan el desarrollo de mejores seres humanos -haciendo referencia a los niños- puesto que siempre estará presente la figura de la moraleja, que es la enseñanza o el mensaje que implícitamente aparecerá en la historia.

Sin embargo, si aún no están en edad de leer con fluidez, los padres podrán tranquilamente leer y hacerles internalizar el mensaje que cada cuento con moraleja les está brindando.


El cuento de la lechera

Uno de los cuentos más famosos de Samaniego es el Cuento de la Lechera, que hace referencia a una niña que tras ordeñar unas vacas va al pueblo a vender la leche que ha obtenido, pero en el camino se dispersa en todos los pensamientos felices sobre lo que hará con el dinero que gane por la venta de la leche.

Tal es la abstracción en sus pensamientos, que pareciera soñar, despierta, pero además, que le impide ver los obstáculos en el camino, por lo que tropieza y derrama toda la leche que había obtenido antes.

La moraleja del cuento es bastante clara, y tiene que ver con que si bien es posible pensar o planificar cosas para el futuro, nunca está bien obsesionarse con el futuro y no disfrutar del proceso para conseguir ciertas cosas. Es una moraleja útil para los niños que quieren obtener ciertas cosas y no dejan de pensar en ellas, a veces, descuidando aspectos importantes de su vida diaria que sí están sucediendo en el presente.


Pedro y el lobo

La historia es de las más complejas dentro de las fábulas, pero no por ser compleja de entender, sino que por lo general es una fábula más larga de lo habitual.

En este cuento, Pedro es un niño al que le gusta decir mentiras -no siempre con mala fe- y asusta varias veces a las personas de su pueblo diciendo que viene un lobo. Las personas toman sus precauciones, guardan sus ovejas, pero resulta que todo es mentira.

Al final, ciertamente venía un lobo, pero Pedro, al decirle a las personas del pueblo, nadie le creyó, porque ya había mentido varias veces antes. La moraleja está, por supuesto, en las consecuencias de mentir.


La liebre y la tortuga

La liebre invita a la tortuga a una carrera, solo para burlarse de ella. Durante la carrera, pasan múltiples eventos que terminan haciendo que la tortuga, con su paso perseverante, pero constante y consistente, acabe ganando la competencia.

La moraleja puede ser muy diversa. Por un lado, la tenacidad o la constancia de la tortuga como valores para luchar por lo que se quiere. Por otro lado, alejar valores negativos como la falsa modestia o la prepotencia, que demostró la liebre.


El león y el ratón

El respeto por los demás, la humildad y el valor de agradecer toda la ayuda recibida -independientemente de las calidades y cantidades de esta- es lo que se aprende con una de las mejores fábulas para niños que hay.

Es una historia interesante porque se explica a sí misma, y es ideal para los niños que no suelen compaginar bien con otros, o que directamente menosprecian los buenos actos que otros niños pudieran hacer por ellos.


El burro flautista

Una historia que habla del valor del estudio y la preparación para tener resultados consistentes en la vida. No por tener un golpe de azar que derive en buenos resultados, ya se será un experto en ciertas cosas. Por supuesto, también habla de forma intrínseca de la humildad.