“Yo que tanto he dado” y no he recibido mi justa cuota de poder, es el pensamiento de una persona con el síndrome de Hubris. Se trata de egos y poder, de ser el líder en todos los aspectos.
Estudiado en neuropsiquiatría y psiquiatría es un trastorno mental en el que el ego de un niño pueda estar creciendo. Estudios sobre el síndrome de crones y tipos de liderazgo tienen mucho que ver.
En este artículo se conocerán, aspectos fundamentales del síndrome de Hubris en niños y cómo abordarlos desde una perspectiva educativa, corregirlo o no de acuerdo a las estrategias usadas en el aula.
¿Qué es el síndrome de Hubris en niños?
El síndrome de Hubris es un trastorno psiquiátrico que se ha estudiado en adultos y niños prácticamente desde la antigua Grecia. Las personas o niños que lo padecer comienzan a desarrollar un ego desmedido que se pone de manifiesto en su vida diaria y en el aula, algunas veces puede ser confundido con liderazgo.
El ego de una persona puede ser tan nocivo como para perjudicar a una gran cantidad de personas, haciéndolas pensar que deberían actuar por órdenes de quienes lo tienen sobrepasado.
Padres y maestros pueden estar influyendo en el desarrollo de más niños con este síndrome, que por demás ha destruido a otros, por sus características autoritarias.
El Síndrome de Hubris se puede observar en algunos líderes políticos de características negativas para las personas.
En el aula también es posible ver niños que quizás tenga el ego muy elevado, un niño que le encanta dar órdenes y que además, puede llegar a pensar ser la autoridad entre varios de sus compañeros.
Es común creer que se trata de un niño líder ¿pero hasta que punto ejerce su liderazgo? En enfoque de este síndrome de Hubris no implica liderazgo.
✍️ Diferencias entre liderazgo y síndrome de Hubris en niños
Considerar el liderazgo como la persona que da las órdenes y los demás cumple, es un concepto muy simple.
El liderazgo es la acción de descubrir que personas pueden realizar de manera más efectiva un trabajo y saber ubicar los talentos en forma adecuada, para que funcionen bien grandes grupos de personas.
Como se puede ver un líder es la persona que, con el ejemplo, muestra a otro como se deben hacer las cosas y elige las personas indicadas para delegar acciones que lleven al éxito.
En cambio, el síndrome Hubris además de ser un problema psiquiátrico observable en la conducta puede crear conflictos sociales en la escuela. Básicamente porque tenemos un niño que da las órdenes.
Cuando hay un niño con este síndrome puede haber situaciones problemáticas como el bullying, la dominación y adicionalmente el problema individual de niño que tiene un ego enorme.
✍️ Cómo detectar el síndrome de Hubris en niños
Hay niños que pueden ser llamados líderes negativos, sin embargo ellos tampoco saben que han desarrollado el síndrome de Hubris.
Se puede comenzar observando y tomando nota en el aula de las actitudes y aptitudes de los niños. En ese sentido las conductas observables son las siguientes:
- Niños que frecuentemente hablan mucho y dan órdenes a sus compañeros
- Suelen ejercer un liderazgo negativo (inducir al cumplimiento de órdenes no adecuadas)
- Ha sido enviado por los maestros a dirección por desacato de normas de convivencia en el aula.
- Ejerce presión social sobre otros niños dentro y fuera del aula
- Responden de manera irrespetuosa a compañeros, maestros y adultos
- Da las órdenes pero es capaz de desarrollar buenas estrategias para resolver problemas
- Crea conflictos en la escuela
Cuando hemos tomado nota de comportamientos autoritarios en algún alumno dentro del aula, es posible que también se produzcan conflictos.
¿Qué hacer con un niño con éstas características? Lo primero es solicitar apoyo de un orientador escolar o psicólogo.
Este profesional aplicara algunos test como por ejemplo el de la “Escala de Percepción del Síndrome de Hubris (PSH-25)”, que básicamente medirá conductas de liderazgo, talentos, habilidades, nivel del ego, aptitudes y actitudes.
Una vez que se establezcan las medias se comparan con las medias normales y se diagnostica o no el síndrome de Hubris.
Si el resto resultara válido para el síndrome, la mitad del problema ya está resuelto. La detección temprana del problema, contribuye a mejorar las actitudes del niño.
Estrategias educativas para mejorar el Síndrome de Hubris en niños
Los niños con síndrome de Hubris diagnosticado, tienen problemas para administrarse como líderes por ello ocurren conflictos y no pueden o no saben manejar el poder.
En lugar de afianzar el síndrome, la estrategia consiste en abrir los canales de comunicación necesarios para administrar el poder que ejercen estos niños sobre otros.
👉 Los juegos de rol son frecuentemente recomendados por especialistas a maestros que tiene esta situación en el aula.
Planear un juego de rol consiste en inventar historias y escribir un guión sobre ella.
Cada niño tendrá un rol similar y de igual poder de decisión en todas las áreas del juego. Por ejemplo se simula un conflicto y se eligen niños moderadores o mediadores de los conflictos.
Es importante conocer que nadie en este juego de roles tendrá poder de decidir nada sin consultar a los demás.
Las normas las indicará el maestro antes de comenzar y la resolución del conflicto será en acuerdo con todos los participantes o la mayoría de ellos. Esto es un juego democrático:
Hay un problema X y el mismo será solucionado por todos y con la acción y participación de todos. No hay que olvidar que los niños con este síndrome requieren terapia psicológica para mejorar su problema.
Actividades sugeridas en el aula
Mediante el uso del juego de roles, se requiere permitir que los demás niños desarrollen su ego en forma correcta y que el niño que tiene el problema pueda llegar a un consenso con el resto in necesidad de imponerse.
- Se crea una historia que implique tomar decisiones urgentes
- Se escribe un guion de los problemas
- Se le da a cada niño rol dentro del juego
- Cada niño planteara respuestas al problema
- Se establecerá una sola solución
- Se impedirá que ningún pequeño imponga su solución
- Se realiza un dialogo productivo entre todos y de ese consenso habrá una resolución.
El problema a ser solucionado en el juego de roles tendrá que ver con la convivencia en el aula de clases.
Por último, establecer la comunicación a pesar de tener niños con el síndrome de Hubris, permitirá complementar las terapias de mismos y mejorar niños con aptitud de líderes negativos.
¿Qué es el síndrome de Hubris y qué estrategias podemos desarrollar en el aula para combatirlo? 👉 Te lo explicamos en este artículo Clic para tuitear