La hipoacusia o discapacidad auditiva es la incapacidad parcial o total para escuchar los sonidos en uno o ambos oídos. Los niños con esta discapacidad con frecuencia tienen dificultades para adquirir y reproducir el lenguaje, por lo tanto, les resulta más complicado adquirir conocimientos y comprender lo que sucede a su alrededor.
De acuerdo a estudios realizados en niños con esta discapacidad se llegó a determinar que en comparación con los niños sin esta afección, tenían 10 meses de retraso en lectura y otros aprendizajes. En este artículo te explicaremos mejor de que se trata la hipoacusia en niños junto a algunos consejos útiles.
¿Qué es la hipoacusia?
La hipoacusia se define como la pérdida de la capacidad auditiva, causando una dificultad o imposibilidad para oír con normalidad, es decir, que se trata de la incapacidad total o parcial para percibir los sonidos en uno o ambos oídos. La hipoacusia suele ser una afección que aparece desde el nacimiento, aunque también puede desarrollarse en niños que tenían una audición normal.
Algunos casos son progresivos, es decir, que empeoran con el tiempo, mientras que otros suelen permanecer estables y no empeoran. También existen hipoacusias transitorias, como las que provocan la otitis en niños de edad más avanzada.
Tipos de hipoacusia
La hipoacusia no sólo se determina por su grado de intensidad en decibelios, sino también por su tipo de acuerdo al grado de afección. Los siguientes son los tipos de hipoacusia más frecuentes:
Hipoacusia unilateral
La hipoacusia unilateral es la pérdida auditiva que se localiza en un solo oído, mientras que el otro oído tiene una audición normal o una pérdida auditiva leve. Este tipo de hipoacusia hace difícil entender el habla y los sonidos, especialmente en ambientes ruidosos, al igual que causa dificultades para determinar la dirección en que se localizan los sonidos.
Hipoacusia bilateral
Es la incapacidad total para percibir los sonidos, esta puede ocurrir cuando alguna parte del oído no funciona normalmente, este puede ser el oído externo, el oído medio, el nervio auditivo y el sistema auditivo. Esta pedida auditiva no es igual en todos los niños y puede deberse a distintas causas.
Hipoacusia mixta
Es una combinación de hipoacusia conductiva e hipoacusia neurosensorial, es decir, que en este caso hay daños tanto en el oído externo o medio, como en el interno. La severidad de esta hipoacusia suele ser leve o profunda; para los niños con hipoacusia los sonidos pueden ser a la vez más bajos de volumen y a su vez muy difíciles de entender.
Hipoacusia tratamiento
Una vez que el niño es diagnosticado, el tratamiento debe ser multidisciplinar, este debe implementarse con la ayuda de un pediatra, logopeda, otorrino, audioprotesista y un psicólogo. Es importante que en el momento en que se dé el diagnóstico la escuela también colabore, tomando en cuenta su edad.
El tratamiento de la hipoacusia consiste en la estimulación precoz del niño, un tratamiento logopédico adecuado y un tratamiento audioprotésico a través de audífonos o implante coclear, este último es un dispositivo electrónico que puede ayudar a que el niño pueda oír.
Consejos para un niño con hipoacusia
Los niños hipoacúsicos tiene hoy en día excelentes oportunidades para desenvolverse en la sociedad y para lograrlo necesita del apoyo de sus padres y profesores. Siguiendo estos consejos puedes ayudar a que el niño con este trastorno tenga una mejor convivencia tanto en la escuela, como en el hogar:
- Anímalo a que juegue, aunque tenga esta discapacidad tiene las mismas necesidades de juego y sociabilización que cualquier otro niño, pero puede que se sienta cohibido; la idea es que pueda compartir con niños oyentes o hipoacúsicos.
- Si el profesor nota que este no participa en el aula, debe invitarle a que pregunte o exprese su opinión.
- Ayúdalo para que utilice un vocabulario cada vez más amplio y así pueda utilizar nuevas palabras.
- Si deseas hacerle algún comentario debes esperar a que el niño esté frente a ti.
- Aunque te ausentes por unos minutos, dile donde estarás, así sabrá dónde encontrarte si te necesita y podrá sentirse más seguro.
- Trata de que conviva en un lugar cálido, armonioso y que invite a la comunicación. En el aula lo más recomendable es que el profesor le permita sentarse en primera fila.